Adolfo Cruz.
Barcelona, España.- Las instalaciones, las certificaciones internacionales, el volumen de tráfico y la apuesta decidida de las empresas dedicadas a este sector han situado en Barcelona como el primer puerto cafetero del Mediterráneo, un referente tanto por el tráfico como por los servicios, especialmente valorado por esta industria altamente especializada.
El café verde –el que todavía no ha pasado por el proceso de tueste, que es diferente según el país donde se vaya a consumir– así como otras mercancías de origen vegetal, como el cacao por ejemplo, requiere de un estricto cuidado en su transporte y almacenamiento, con una manipulación muy especializada y un control de temperatura y humedad a lo largo de toda la cadena logística.
A pesar de que se transporta dentro de contenedores para los viajes marítimos y terrestres, el café sigue siendo un producto que viaja y se almacena en sacos de yute apilados o en container bags.
Por volumen, el tráfico de café en el puerto representó una cifra de 300 mil toneladas durante el 2014, de las cuales más de un 20% correspondieron a tránsitos. Se trata de un tráfico estratégico y especialmente relevante si se tiene en cuenta que se trata de una mercancía que requiere de unas especiales condiciones de manipulación y almacenamiento.
Cuatro empresas especializadas en logística del café
Cuatro empresas especializadas en logística del café, y con una importante presencia internacional, operan actualmente en el Port de Barcelona: BIT, Molenbergnatie, VIORVI y Pacorini.
Estas empresas nutren de las diferentes variedades que llegan a Barcelona tanto a los grandes importadores europeos pertenecientes a grupos multinacionales como a los pequeños y medianos tostadores de ámbito regional.
Debe destacarse que Barcelona es el único puerto del Mediterráneo homologado como puerto receptor de café, tanto por la bolsa de New York ICE (Intercontinental Exchange -Futures) cómo por la de London LIFFE (London International Financial Futures and Options Exchange) para almacenar café de las variedades robusta y arábiga, que cotizan en estos mercados.
Estos procesos de homologación exigen a los operadores unos elevados niveles de calidad respecto a los espacios y condiciones de almacenamiento del café. Por su parte, el puerto debe demostrar las máximas garantías de manipulación, así como unas infraestructuras logísticas adecuadas al producto.
Por países, los principales proveedores de café al Port de Barcelona son: Vietnam, Brasil, Argelia, Colombia, Kenia, y México.
Hub mediterráneo de café
La homologación de las instalaciones, la ubicación de los almacenes dentro del recinto portuario y la mejora de su conectividad con los principales puertos del Mediterráneo y los mercados europeos han sido las principales herramientas para situar al Port de Barcelona como primer puerto importador del sur de Europa y hub regional para la redistribución de café al resto de países de la cuenca mediterránea.
El Port de Barcelona desarrolla una labor activa y continuada de promoción de sus instalaciones y servicios específicos para esta industria. En este sentido, representantes de la Autoridad Portuaria, de las empresas almacenistas y de la Federación Española del Café (FEC), han visitado recientemente Nueva York y Nueva Jersey (USA) con un intenso programa de visitas a empresas y administraciones relacionadas con el tráfico de café con el objetivo de incrementar las relaciones y detectar nuevas oportunidades de negocio.
