Veracruz, Ver.- A medida de que se prolonga la combinación de la crisis del COVID-19 con la recesión económica, el sector social de los puertos que aglutina a la gente de mar, dedicada principalmente a los servicios, ha resentido la falta de apoyos de tipo financiero que México olvidó tomar en cuenta conforme a las recomendaciones de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Comercio y Desarrollo (UNCTAD) ante la emergencia.
Juan Carlos Merodio López, titular del Comité Marítimo International de la ONU para México, ha manifestado su preocupación poniendo sobre la mesa de las autoridades, las 10 acciones que aún podría aplicar México, urgentemente, a fin de apoyar a quienes participan en la operación de áreas relacionadas a los buques, puertos y el comercio exterior.
Además de mantener los puertos abiertos en el largo camino a la recuperación, se requieren programas de apoyo económico y financiero y dar prioridad a la tecnología, revisar aduanas, facilitar el transporte en fronteras, asegurar el derecho de tránsito y acceso a puertos, terminales, almacenes, en donde participan numerosas personas.
Dado que el proceso hacia la normalidad aun tomará tiempo, también es necesario proteger la transparencia y seguridad de la información; contar con un plan preventivo ante potenciales conflictos legales entre el comercio, el transporte marítimo y terrestre, proteger a los embarcadores y proveedores de servicios asociados.
El representante de la ONU se cuestionó sobre las acciones de México y si se estará llevando de manera adecuada la concurrencia de las autoridades, compañías navieras, prestadores de servicios y agentes de la cadena, ya que el transporte marítimo como sector estratégico mueve el 80% del comercio internacional, y aun con pandemia se debe seguir garantizando el intercambio y el abastecimiento a millones de hogares.