Pedro Cruz.
Veracruz, Ver.- El Secretario General de la OMI, Kitack Lim, hizo un llamamiento a todos los Estados Miembros de la OMI en pos de una distribución mundial equitativa de las vacunas contra la COVID-19, más allá de satisfacer sus necesidades nacionales, a fin de garantizar que la gente de mar pueda acceder a las vacunas.
En una declaración, Lim reiteró su llamamiento para que la gente de mar y el personal marítimo sean designados como “trabajadores esenciales” y señaló que algunos países clave que suministran personal marítimo dependen del mecanismo COVAX de la Organización Mundial de la Salud (OMS) para acceder a las vacunas.
“Para garantizar el acceso a las vacunas de esos países, hago un llamamiento a todos los Estados Miembros de la OMI para que colaboren en una distribución mundial justa, más allá de satisfacer sus necesidades nacionales. Ningún marino debería quedarse atrás ni verse obligado a renunciar a su carrera por los limitados recursos de su país de origen”, dijo Lim.
“Hago un llamamiento a todos los Estados Miembros de la OMI a que colaboren en pos de una distribución mundial equitativa, más allá de dar respuesta a sus necesidades nacionales. No se debería dejar de un lado a la gente de mar u obligárseles a abandonar sus carreras debido a lo limitado de los recursos en sus propios países” agregó.
“La salud del colectivo mundial de la gente de mar y la protección de sus entornos laborales han de continuar siendo una de nuestras principales prioridades y solo pueden garantizarse si el sector y los Estados Miembros continúan habilitando lo necesario para evitar la propagación del virus, esto es, la disponibilidad de pruebas de detección, equipo adecuado de protección personal y el acceso a instalaciones médicas y de higiene sanitaria”, añadió.
“No podemos permitirnos bajar la guardia a la hora de abordar la crisis humanitaria que está teniendo lugar en el mar. Por lo tanto, reitero mi llamamiento a todos los Estados Miembros para que designen a toda la gente de mar y al personal marítimo como trabajadores esenciales que prestan un servicio fundamental. Hasta la fecha solo 58, de nuestros 174 Estados Miembros me han notificado que lo han hecho”, subrayó.
La vida y el trabajo de la gente de mar se han visto dramáticamente afectados por la pandemia de COVID-19. En el último trimestre de 2020, el número estimado de gente de mar en todo el mundo que estaban a la espera de ser relevados o de incorporarse a sus buques era de 400 000. Ahora, en mayo de 2021, gracias a los esfuerzos de colaboración de los Estados Miembros, el sector del transporte marítimo, los interlocutores sociales y otros organismos de las Naciones Unidas, ese número se estima en unos 200 000.
“No obstante, esta cifra sigue siendo inaceptablemente alta y la crisis humanitaria en el mar no ha terminado en absoluto. La gente de mar sigue enfrentándose a enormes dificultades para la repatriación, los viajes para embarcar, el acceso adecuado a la atención médica y el permiso de tierra. A pesar de estas dificultades, la gente de mar a bordo de los buques ha seguido trabajando, prestando sus servicios esenciales a la población de todo el mundo”, concluyó Lim.