Pedro Cruz.
Ciudad de México.- La sola idea de recibir el producto que se ordenó online días atrás -y en algunos casos con tan solo horas de anticipación- es emocionante, pero para llegar a este punto muchas cosas tuvieron que suceder. Lo primero es la producción, la cual, dependiendo del producto, puede ser realizada en casa o en talleres pequeños que se encuentran dentro de la ciudad, sin embargo, en caso de que el producto sea de mayor tamaño, la mayoría de las veces se produce en zonas aledañas.
Como segundo paso, debe de llegar a un lugar de almacenamiento del cual se distribuirá al cliente final, está última parte en la que el producto va del almacenaje al cliente es una de las más importantes y retadoras, la llamada última milla. Son muchos los factores tanto internos como externos que pueden llegar a involucrarse en el flujo de entrega, sobre todo en esta última milla en la que el producto está a nada de llegar al comprador.
En cuanto a los factores internos tenemos: planeación de rutas, dimensiones de los autos en los que se reparten los productos, todo el personal que apoya tanto en el almacenamiento como en la operación de ruta; mientras que, en los externos: el clima, tráfico, manifestaciones, el tiempo de los consumidores para recoger los productos, etc.
Al final, para las empresas de logística es de sumo valor que anticipen de la mejor manera para entregar en tiempo y en forma y así, tanto consumidor como seller, logren la mejor experiencia, lo que se conoce como un win-win. Existen diversas formas de mejorar la operación en la última milla, la principal, contar con un partner logístico que se adecue a las necesidades de cada negocio.
Que sea capaz de homologar su tecnología con la del seller para que la sinergia sea lo más cercana a perfecta y de este modo cerrar brechas de errores. Otro punto que es por demás importante es que el mismo partner logístico se encargue de la gestión en todas las etapas, de este modo recae en un solo proveedor el journey completo y se cuenta con mayor control ya que al vivir todo “bajo el mismo techo” la comunicación es mucho más eficiente.
clicOH, startup dedicada a la logística especializada en las entregas de la última milla con presencia en 5 países de la región (incluyendo México) y que recientemente recibió una ronda de inversión de 25 millones de dólares para su ampliación de negocio, cuenta con soluciones integrales de envío para el comercio electrónico y, sobre todo, para que todo el proceso se encuentre homologado y por ende sea un éxito:
● Integración con la tienda: a través de la plataforma de clicOH es posible integrar sin mayor dificultad la tienda.
● Colecta de paquetes (Primera Milla): clicOH recoge los paquetes una vez que se encuentran armados y listos para ser entregados, de este modo, se agiliza el proceso de envío (última milla).
● Drop Off: es posible que el seller deje sus paquetes en cualquier punto de retiro clicOH para después ser entregados por la compañía.
● Retiro de mercancía (Primera Milla – Opcional): en clicOH es posible recoger el producto y guardar toda la mercancía, de este modo el seller no gasta en infraestructura de almacenamiento.
● Warehouse: clicOH cuenta con muchos centros de distribución para almacenar productos. No tiene costos fijos, ya que solo se paga el espacio que se utiliza. Además, es posible unificar todo el stock en un mismo lugar.
● Cross Docking: optimiza el tiempo de almacenaje, haciéndolo inexistente o muy limitado en determinados productos. La mercancía no se quede en el almacén, en cuanto llega, sale directamente a los clientes.
● Picking, Packing y etiquetado: en el Warehouses, se selecciona, embala y se etiquetan los productos para garantizar que cada envío sea correcto y que los clientes los reciban de la forma más rápida y segura.
