Susana Cruz.
Barcelona, España.- El tráfico de líquidos a granel en el Port de Barcelona volvió a crecer con fuerza en el mes de abril, enjugando así parte de la caída registrada en las cifras interanuales desde principios de año. El gas natural ha liderado esta recuperación, superando en 14.584 toneladas las cifras de tráfico del año pasado, un aumento del 1,1% después de registrar un descenso del 46,6% en enero, cuando dejaron de llegar barcos debido a que los depósitos estaban llenos.
También aumenta el tráfico de productos químicos (+92.839 toneladas) y, en menor medida, el de aceites y grasas, así como el de abonos. Productos como el gasóleo, el fuel o los biocombustibles, a pesar de seguir en cifras inferiores a las de 2022, enjugan parte del descenso, siendo la gasolina el único tráfico que mantiene una tendencia a la baja.
También en la categoría de graneles, los tráficos acumulados en el mes de abril en la mayoría de sólidos muestran un aumento sostenido. Es el caso del haba de soja (+10,9%) y especialmente el cemento (+44,9%) y la sal (+72,5%).
Como ya va siendo tendencia, el tráfico de automóviles sigue siendo uno de los que registra unos aumentos más importantes, sumando 266.789 unidades hasta abril, un 88,8% más que el año pasado. A pesar de aumentar en todas las modalidades, el desembarque y el tráfico son las operaciones que más aumentan, con incrementos próximos al 200% interanual.
El tráfico total entre enero y abril, sin embargo, ha mantenido la tendencia a la baja a raíz de la contracción de los intercambios comerciales que se está produciendo en todo el mundo y que están reflejando el conjunto de puertos de la región. Así, en lo que llevamos de año, han pasado por el Port de Barcelona 20,7 millones de toneladas, un 11,4% menos que en abril de 2022. En una línea similar, el tráfico de contenedores ha sido de 1.025.318 TEU (-13%). Los contenedores llenos de importación (-8,7%), de exportación (-10,5%) y de tráfico (-26,8%) retroceden respecto de 2022.
Las UTI (Unidades de Transporte Intermodal) bajan un -3,7%, registrando descensos en los intercambios con los principales puertos mediterráneos con excepción de las Islas Baleares, dónde se incrementan un 5%.
Los tres primeros meses del año han pasado por el Port de Barcelona un total de 914.794 pasajeros, cifra que significa un crecimiento del 87,9% con respecto al mismo periodo del año 2022. Los pasajeros de cruceros crecen un 147,6%. Con respecto a los ferris, el número de pasajeros también ha aumentado, en este caso un 36,6%.
Con respecto a las áreas geográficas, los tráficos con los principales forelands del Port de Barcelona registran descensos, a excepción de Vietnam, la Unión de los Emiratos Árabes y Malasia, que mantienen una tendencia al alza.