Pedro Cruz.
Ciudad de México.- La Autoridad investigadora (AI) de la Comisión Federal de Competencia Económica (Cofece) concluyó, de manera preliminar, que no existen condiciones de competencia en el mercado de harina de maíz nixtamalizada que se vende a las tortillerías de México.
¿Cómo llegó la AI a las conclusiones de su dictamen preliminar?
La AI dividió al país en ocho regiones y analizó las ventas totales y la capacidad instalada de las empresas entre 2016 y 2022, identificando que Gruma tiene:
Entre el 50% y el 90% de las ventas en cada una de las regiones. Es decir, en algunas regiones del país, casi 9 de cada 10 kilos de harina son vendidos por Gruma.
Una participación de mercado entre 22 y 80 veces mayor que su mayor competidor en cada una de las regiones.
Un precio promedio casi 10% mayor que el de sus competidores a nivel nacional.
De tal manera, la AI identificó que Gruma mantiene una ventaja significativa e irreversible frente a todos sus competidores que le permite establecer precios elevados sin que otras empresas puedan hacerle competencia suficiente. Asimismo, se identificó que Gruma tiene estrategias específicamente diseñadas para dificultar que los tortilleros puedan cambiar de proveedor.
De hecho, la AI inició la investigación al identificar un aumento constante en los precios de la harina de maíz a pesar de que el precio de su principal insumo, el maíz, se mantenía estable.
¿Por qué es relevante este dictamen preliminar?
La tortilla de maíz es un alimento básico para los mexicanos. El 98.6% de la población consume tortilla de maíz y 68% la consume diario (Profeco, 2017). La tortilla de maíz representa casi el 6% del gasto en alimento de los hogares (INEGI, 2020), y la harina de maíz nixtamalizada representa casi la mitad del costo de producción de la tortilla de maíz que no es producida directamente de masa.
El dictamen preliminar de la AI propone medidas que aumenten la competencia en el mercado de harina de maíz nixtamalizada, lo cual podría impactar en el número y tamaño de las empresas harineras en México, generando incentivos para que Gruma baje sus precios, incremente su innovación o mejore sus productos para competir, lo que beneficia a las y los consumidores de tortilla.
¿Qué medidas correctivas propone la AI?
La AI identificó que esta situación deriva de un problema estructural del mercado.
Por lo tanto, la única solución para reactivar la competencia en el mercado, de modo que se fomente la entrada y crecimiento de nuevos competidores y, finalmente, permita que las y los mexicanos disfruten de mejores precios es:
Que Gruma venda cinco plantas de producción de harina de maíz nixtamalizado, así como toda la flota de distribución y fuerza de ventas de dichas plantas, y
Que Gruma elimine las estrategias diseñadas para evitar que las tortillerías cambien de proveedor, y que implemente mecanismos de transparencia y supervisión, con el fin de que haya mayor competencia en el mercado.
¿Qué sigue?
El dictamen preliminar de la AI es el primer paso del procedimiento. Los interesados podrán ahora presentar argumentos y pruebas y, finalmente el Pleno de la Cofece analizará la totalidad de la evidencia para emitir una resolución.
La resolución final del Pleno puede adoptar, modificar o rechazar las propuestas de la AI, por lo que Gruma no está obligada, hasta este momento, a implementar las medidas correctivas propuestas por la AI.
La investigación de la Comisión busca que haya mayor competencia y dinamismo en mercados tan importantes como el de la harina de maíz en beneficio del consumidor final.